A Ver Hagamos Color...
Amarillo, rojo, verde, rondas, cuentos, bailes, juegos...
"Este tanque, reservorio gigante de agua nos servirá de mural..."
Los muchachos de la Red han llegado al poblado llamado “Señor de Luren”. Hacen rondas con los peques y las peques poniéndose a charlar para jugar junto a ellos:
“Ahora nos damos todos las manos y nos presentamos uno a uno dentro de esta ronda” “Vamos a decir nuestro nombre con un movimiento. Yo me llamo...”
La mañana empieza así con voces de todos los colores pronunciando su propio nombre dentro de un juego colectivo donde todos empiezan a conocer el nombre de los demás.
“A ver que dibujamos acá en este reservorio, mmm...Qué desean que dibujemos niños...”.
Decenas de opciones se sueltan y empiezan las ideas a tomar voz.
“Dibujemos todos...”.
Por un lado se instalan los módulos de juego, por el otro hay que tomar pinceles y colores dibujando lo que salga de la imaginación para hacer un mural que identifique el parque. Enorme se agita empezando a bailar sobre esta planicie el viento. Todos están pintados con colores en los rostros y manos. Narices rojas y pinceles, sonrisas y pequeños participando juntos...Se siembran llantas y piedras que también se pintan. Caminos y senderos...Hay cansancio pero uno ya se acostumbra a ello. Hay fuerza también en la alegría que les rodea.
Con aquella fuerza compartida se trabaja sábado y domingo enteros para realizar las jornadas bajo aquel sol brillante de Ica.
Se llega al domingo y se está acabando de instalar el parque. Ya es tarde y hay que inaugurarlo. Los niños no quieren esperar más. Han participado del diseño y decoración de todo su parque de juegos y están listos para hacer uso de él. Suben a los toboganes y extienden las manos al descender por las resbaladeras. Las colas son largas pero todos quieren subir a él; luego a los columpios y los pasamanos. Risas y movimiento de rostros contentos. El sol cae y ya empieza a irse esta hora.
Al irse uno ve que aquellas imágenes del principio ya no están en la retina. Ahora se ha hecho color sobre la arena. Los niños han reflejado bien su alegría bajo el sol ardiente del mediodía; sobre la cara de la arena fija le han dibujado su sonrisa. Han tomado la piedra y le han dibujado rostros o una flor sobre una llanta. Sobre una planicie de arena han hecho un parque que con colores y juegos ahora ríe, baila y canta.
Amarillo, rojo, verde, rondas, cuentos, bailes, juegos...
"Este tanque, reservorio gigante de agua nos servirá de mural..."
Los muchachos de la Red han llegado al poblado llamado “Señor de Luren”. Hacen rondas con los peques y las peques poniéndose a charlar para jugar junto a ellos:
“Ahora nos damos todos las manos y nos presentamos uno a uno dentro de esta ronda” “Vamos a decir nuestro nombre con un movimiento. Yo me llamo...”
La mañana empieza así con voces de todos los colores pronunciando su propio nombre dentro de un juego colectivo donde todos empiezan a conocer el nombre de los demás.
“A ver que dibujamos acá en este reservorio, mmm...Qué desean que dibujemos niños...”.
Decenas de opciones se sueltan y empiezan las ideas a tomar voz.
“Dibujemos todos...”.
Por un lado se instalan los módulos de juego, por el otro hay que tomar pinceles y colores dibujando lo que salga de la imaginación para hacer un mural que identifique el parque. Enorme se agita empezando a bailar sobre esta planicie el viento. Todos están pintados con colores en los rostros y manos. Narices rojas y pinceles, sonrisas y pequeños participando juntos...Se siembran llantas y piedras que también se pintan. Caminos y senderos...Hay cansancio pero uno ya se acostumbra a ello. Hay fuerza también en la alegría que les rodea.
Con aquella fuerza compartida se trabaja sábado y domingo enteros para realizar las jornadas bajo aquel sol brillante de Ica.
Se llega al domingo y se está acabando de instalar el parque. Ya es tarde y hay que inaugurarlo. Los niños no quieren esperar más. Han participado del diseño y decoración de todo su parque de juegos y están listos para hacer uso de él. Suben a los toboganes y extienden las manos al descender por las resbaladeras. Las colas son largas pero todos quieren subir a él; luego a los columpios y los pasamanos. Risas y movimiento de rostros contentos. El sol cae y ya empieza a irse esta hora.
Al irse uno ve que aquellas imágenes del principio ya no están en la retina. Ahora se ha hecho color sobre la arena. Los niños han reflejado bien su alegría bajo el sol ardiente del mediodía; sobre la cara de la arena fija le han dibujado su sonrisa. Han tomado la piedra y le han dibujado rostros o una flor sobre una llanta. Sobre una planicie de arena han hecho un parque que con colores y juegos ahora ríe, baila y canta.